
Este lunes 21 de abril, el dólar blue se ubica en $1160 para la venta, mientras que el dólar oficial cotiza a $1108,89, confirmando una brecha mínima entre ambos tipos de cambio y marcando un claro triunfo del plan económico de Javier Milei. Hace apenas diez días, antes del anuncio de la salida del cepo cambiario, la divisa paralela operaba a $1375, lo que significa una caída de más de $200 en menos de dos semanas.
Este desplome del dólar blue no es casual ni producto del azar, sino la consecuencia directa de la decisión política del Gobierno libertario de desmantelar las restricciones cambiarias, un ancla del modelo kirchnerista que generaba distorsiones, corrupción y un mercado paralelo disparado.
La medida impulsada por el equipo económico de Luis Caputo y validada por el presidente Javier Milei no solo normalizó el mercado cambiario, sino que además envió una señal contundente a los inversores: la Argentina vuelve a respetar las reglas de la economía de mercado, sin controles artificiales ni intervención estatal desmedida.
El tipo de cambio paralelo, que durante el mandato de Alberto Fernández se transformó en un termómetro del miedo y la desconfianza hacia el rumbo económico, ahora comienza a perder relevancia en un contexto de mayor previsibilidad y transparencia. La fuerte caída del blue demuestra que el mercado cree en el ajuste fiscal, en el sinceramiento de precios y en el camino hacia una Argentina libre de populismo.
La brecha entre el oficial y el blue se reduce a mínimos históricos, y eso no solo descomprime tensiones, sino que además elimina la lógica especulativa de la economía bimonetaria impuesta por el kirchnerismo.
Así, Milei sigue avanzando en su hoja de ruta libertaria: achicar el Estado, liberar los mercados y devolverle a los argentinos una moneda fuerte y estable. El dólar deja de ser refugio para volver a ser una opción. Otro paso hacia el renacer de la economía argentina.