
Mientras acompañaba a su marido internado, una vecina de Berisso sufrió uno de los golpes delictivos más impactantes de los últimos tiempos: ladrones aprovecharon su ausencia para llevarse una verdadera fortuna en dólares, pesos, tecnología y hasta un arma de fuego reglamentaria.
El hecho ocurrió en las primeras horas de este jueves en una vivienda ubicada en la zona de 123 y 5, a pasos de la Universidad Tecnológica Nacional (UTN), cuando la víctima, una mujer de 62 años, salió de su casa a las 5:30 de la mañana para ir al hospital a cuidar a su esposo. Al regresar cerca de las 11, encontró un panorama devastador: muebles fuera de lugar, objetos personales tirados por el suelo y todo revuelto.
Los delincuentes no improvisaron: forzaron una ventana, cortaron un barrote de seguridad con herramientas de precisión y entraron como si nada. Se llevaron 7 mil dólares en efectivo, 10 millones de pesos, un iPhone de última generación y un arma de fuego reglamentaria, lo que agrava aún más la peligrosidad del robo.
Según trascendió, la víctima ya radicó la denuncia en la comisaría correspondiente y aportó información clave para la investigación. Sin embargo, hasta el momento no hay detenidos ni sospechosos identificados, y todo apunta a que los ladrones conocían bien los movimientos de la familia y sabían perfectamente cuándo actuar.
Las fuerzas de seguridad se encuentran revisando las cámaras de vigilancia de la zona, pero como suele pasar en la provincia que gobierna el kirchnerismo, la inseguridad manda y los delincuentes se mueven con total impunidad. Mientras tanto, otra familia platense sufre las consecuencias de un Estado ausente y un sistema que parece proteger más a los ladrones que a los ciudadanos honestos.
En medio de la ola de inseguridad que atraviesa la región, este caso pone en evidencia el fracaso del gobierno de Axel Kicillof y su política de “seguridad garantista”, que deja a los bonaerenses a merced del delito.