Los aumentos en vivienda, alimentos, transporte y salud explicaron casi dos tercios del alza mensual. En lo que va del año, los precios acumulan una suba del 25,3%.
La inflación en la Ciudad de Buenos Aires se mantuvo estable en octubre, con un incremento del 2,2% respecto del mes anterior, según informó este jueves el Instituto de Estadística y Censos porteño (IPCBA). La cifra repite prácticamente la variación de septiembre y refleja que, pese a la moderación de precios registrada en los últimos meses, la economía todavía no logra salir del estancamiento inflacionario que el Gobierno asegura haber superado.
Con este resultado, el índice de precios al consumidor porteño acumula un 25,3% en los primeros diez meses del año y muestra una suba interanual del 33,6% frente a octubre de 2024.
Vivienda, alimentos y transporte, los motores del alza
El incremento del mes estuvo impulsado por cinco divisiones que concentraron el 64,8% de la variación general:
- Vivienda, agua, electricidad, gas y otros combustibles,
- Alimentos y bebidas no alcohólicas,
- Restaurantes y hoteles,
- Transporte,
- y Salud.
Entre ellas, Vivienda, agua, electricidad, gas y combustibles fue la categoría de mayor incidencia. Con una suba promedio del 2%, aportó 0,4 puntos porcentuales al índice general. El aumento se explicó principalmente por los ajustes en los valores de los alquileres (2,2%) y en los gastos comunes de los edificios (2,1%).
Los alimentos y bebidas, otro componente sensible del gasto familiar, también mostraron un incremento relevante, mientras que los servicios vinculados al transporte y la salud continuaron presionando sobre el costo de vida en la capital.
Una inflación que no cede
El comportamiento de los precios en la Ciudad refleja la persistencia de una inflación moderada pero firme, que limita la recuperación del consumo y mantiene la presión sobre los ingresos. Aunque el Gobierno sostiene que la tendencia general muestra signos de estabilización, los analistas advierten que la dinámica de los precios regulados y las actualizaciones tarifarias previstas hacia fin de año podrían impedir una baja más significativa en los próximos meses.