El kirchnerismo volvió a dejar en claro cuáles son sus prioridades: no les importa la inseguridad, la economía devastada o los jubilados pobres. Les preocupa, eso sí, que los policías que cuidan el Congreso no usen “sus” baños. Así de ridícula y miserable es la casta que aún parasita el Senado.
Ocho senadores de Unión por la Patria, entre ellos el histórico operador K Oscar Parrilli y otros como Silvia Sapag y Sergio Leavy, firmaron una carta dirigida a la vicepresidente Victoria Villarruel para que se limite el uso de los sanitarios del Congreso a los efectivos de las fuerzas de seguridad que custodian la zona en días de protesta. La excusa es evitar “molestias” al personal legislativo, como si los policías fueran ciudadanos de segunda o empleados a los que se puede tratar como basura.
Por supuesto, la carta generó un inmediato repudio, principalmente del Gobierno. La ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, salió al cruce: “Insólito pero real. El kirchnerismo pidió que las Fuerzas de Seguridad no usen los baños del Senado. Ya sabíamos que no los querían… pero ni para ir al baño los dejan. Un poco de respeto y sentido común. Son los que nos cuidan todos los días”.
La carta también señala que es responsabilidad del Ejecutivo garantizar condiciones básicas a las fuerzas pero fuera del ámbito legislativo. Un razonamiento típico de la casta que vive encerrada en sus privilegios, desconectada de la realidad de un país donde el común de la gente tiene que hacer fila hasta para entrar a un baño público.
El pedido no es casual: el kirchnerismo respalda abiertamente las protestas piqueteras contra el Gobierno de Milei y odia el protocolo antipiquetes que Bullrich aplica cada miércoles para frenar los cortes. Como no pueden frenar el orden público, ahora quieren humillar a la policía y marcar territorio en el Congreso.
Así es la casta: mientras al país le cuesta salir adelante, los senadores K gastan su tiempo y sueldos en pelear por baños exclusivos. ¿Hasta cuándo vamos a pagarle a esta gente para que se ocupe de estupideces?