En medio del ajuste más profundo en décadas, el Gobierno logra una mejora histórica en la situación de la niñez. La pobreza infantil baja y Unicef lo admite: las políticas de Milei están funcionando.
En una admisión que incomoda al relato kirchnerista y descoloca a los agoreros del ajuste, el representante de Unicef en Argentina, Rafael Ramírez Mesec, confirmó que casi 1,7 millones de chicos salieron de la pobreza en el último año. Y lo hizo en tono de reconocimiento, destacando el dato como “muy llamativo y digno de destacar”, en medio de un fuerte recorte del gasto público impulsado por el presidente Javier Milei.
El funcionario del organismo de la ONU remarcó que, pese al recorte de cinco puntos del PBI, hubo mejoras concretas en la situación social de la niñez: “Claramente, es algo digno de destacar. No se puede negar que es un ajuste fuerte, pero lograr bajar la pobreza en este contexto es un resultado importante”, afirmó durante una entrevista con Infobae en Vivo.
Entre los factores positivos, Unicef señaló la ampliación de la AUH (Asignación Universal por Hijo) y de la Tarjeta Alimentar como herramientas eficaces. Gracias a la decisión del Gobierno de aumentar su alcance y cobertura, se generaron impactos reales en las familias más vulnerables, sin clientelismo ni intermediarios políticos.
Ramírez Mesec también reconoció la buena articulación con el Ministerio de Capital Humano y valoró que la primera infancia haya sido priorizada: “Tenemos un diálogo fluido con las secretarías. La niñez es un tema que convoca voluntades”, expresó.
El representante de Unicef elogió el rumbo, aunque también advirtió que persisten desafíos en educación y acceso digital. Sin embargo, el dato que retumbó en todos los despachos políticos fue claro: con ajuste y sin demagogia, Milei logró reducir la pobreza infantil a niveles que ni el kirchnerismo ni el macrismo pudieron alcanzar.
Mientras los mismos de siempre critican desde el atril y militan el caos, los hechos empiezan a mostrar que hay otro camino posible. Uno sin corrupción, sin dádivas, pero con resultados reales.