
Berisso vuelve a ser escenario de la inseguridad y la impunidad que golpean a la región. Tres menores, de entre 14 y 17 años, fueron sorprendidos “in fraganti” robando en una vivienda, llevando consigo un botín que dejó a todos los vecinos en estado de alerta. Sin embargo, tras la aprehensión, la Justicia decidió liberarlos y entregarlos a sus padres, demostrando una vez más la laxitud que permite que la delincuencia juvenil crezca sin freno.
Los adolescentes ingresaron violentamente a una casa deshabitada en avenida Montevideo y 46, y se alzaron con dos valijas llenas de objetos que incluían botas, amplificadores, cámaras, parlantes, hidrolavadoras, herramientas eléctricas y hasta una estufa eléctrica. La Policía los interceptó cuando intentaban escapar, y todo el botín fue secuestrado.
Lo más indignante es que, tras ser aprehendidos, los tres menores volvieron a sus hogares sin sanciones que realmente los frenen. La UFI del Joven abrió una causa por “Robo y encubrimiento” y simplemente dispuso entregarlos a sus progenitores, evidenciando el fracaso del sistema judicial ante la creciente delincuencia juvenil.
Mientras tanto, los vecinos viven con miedo y sin respuestas claras de las autoridades municipales y provinciales. ¿Cuánto tiempo más se seguirá tolerando esta impunidad que alimenta la inseguridad? Berisso y toda la región necesitan justicia y seguridad reales ya.