
Mientras el Hospital Interzonal General de Agudos “San Martín” de La Plata se cae a pedazos y sigue sin brindar servicios esenciales como la atención a pacientes quemados —cerrada desde hace más de dos años—, el Ministerio de Salud bonaerense que comanda Nicolás Kreplak aparece envuelto en un nuevo escándalo por presuntas licitaciones irregulares que despiertan todas las alarmas.
El senador de La Libertad Avanza, Carlos Curestis, presentó un pedido formal y urgente de informes para que el gobierno de Axel Kicillof explique el entramado detrás de las millonarias obras en el hospital platense. En particular, se apunta contra una licitación de 200 millones de pesos para supuestas tareas de mantenimiento eléctrico en el pabellón Bossio del nosocomio, adjudicada a la polémica empresa SERBER S.A., firma que ya ha sido “casualmente” beneficiada en varias ocasiones por la administración provincial.
“Nos encontramos frente a un esquema de cartelización descarada”, advirtieron desde el bloque libertario. “Los pliegos están hechos a medida para una empresa en particular, y los montos no sólo carecen de justificación técnica, sino que parecen inflados a niveles escandalosos”, disparó Curestis. Además, se denunció una segunda licitación por 40 millones de pesos para la reparación de grupos electrógenos, también bajo sospecha.
Los libertarios no dudan en señalar al Ministerio de Salud como el principal responsable de maniobras turbias que, lejos de mejorar el sistema sanitario, parecen destinadas a favorecer a empresas amigas. “El hospital está devastado, el personal sin insumos, y mientras tanto se dilapidan cifras obscenas en obras que nadie ve ni entiende”, sentenciaron.
El pedido de informes exige conocer qué empresas participaron, qué montos ofertaron y bajo qué criterios se definieron las adjudicaciones. Hasta ahora, la única respuesta del oficialismo ha sido el silencio, ya que desde el ministerio de Kreplak evitaron dar explicaciones.
Una vez más, el gobierno de Axel Kicillof y sus funcionarios quedan en el ojo de la tormenta por la falta de transparencia en el manejo de los recursos públicos. Desde La Libertad Avanza exigen rendición de cuentas inmediata y convocan al resto del Senado a acompañar el pedido para frenar lo que consideran una red de corrupción institucionalizada en el sistema de salud bonaerense.
Mientras tanto, los bonaerenses siguen esperando que los hospitales funcionen y que los recursos lleguen donde realmente hacen falta. Pero, como ya es costumbre bajo la gestión Kicillof, la plata desaparece y la salud pública sigue en estado terminal.