
En una noche inolvidable para el fútbol argentino, el triunfo 4-1 de la Albiceleste sobre Brasil se transformó en el escenario perfecto para que el Presidente Javier Milei rindiera homenaje al arte y la eficacia de la Selección Nacional. Con un estilo inconfundible, Milei desplegó un torrente de elogios y comparaciones que resonaron en todo el país, y lo hizo en términos que encapsulan la pasión y la excelencia del equipo.
Una explosión de sentimientos
En sus declaraciones posteriores al partido, Milei celebró el triunfo afirmando que “la alegría nao tem fim”, subrayando la magnitud de la euforia que se palpó en cada rincón de Argentina. “Muchas gracias por esta noche con tantas alegrías”, expresó el mandatario en su red social, dejando claro que este triunfo va más allá del marcador: es una celebración del talento, la dedicación y la esencia del fútbol argentino.
Un espectáculo estético
Durante una entrevista en Radio Mitre, Milei no dudó en resaltar la belleza y contundencia del juego de la Albiceleste. “A mí me parece que fue algo descomunal. No solo la contundencia en cantidad de goles, sino la cuestión estética. La Argentina ganó, gustó y goleó, las tres G”, enfatizó, calificando al encuentro de “baile morboso”, una descripción que evoca tanto la fluidez como el espectáculo del juego ofrecido.
Elogios a la técnica y al talento
El presidente no escatimó en elogios al cuerpo técnico y a sus jugadores, reconociendo la enorme labor de Lionel Scaloni y su staff. “Cuando la cabeza está podrida, las cosas no funcionan, y acá la cabeza está a la perfección, no es para cualquiera. Quiero manifestar mi admiración por Scaloni y el cuerpo técnico; son unos líderes positivos de características enormes”, afirmó Milei, posicionándolos como pilares esenciales para el éxito del conjunto albiceleste.
Asimismo, el mandatario rindió tributo a Lionel Messi, a quien considera una “debilidad crónica”. Aunque Messi estuvo ausente por lesión en los dos últimos encuentros, Milei rememoró viejos tiempos y destacó su influencia: “Es lo más grande que vi en mi vida, no puedo contestar de forma racional. Es mi debilidad, nunca vi a un jugador hacer lo que hace él. Si esto fue un baile morboso, es imposible no pensar cómo hubiera sido con Messi, capaz eran 10 los goles.”
Una muestra de grandeza en la cima
Milei también aprovechó la ocasión para reflexionar sobre el desafío de mantenerse en la cumbre, recordando que “estar en la cima no es fácil”. Con la misma pasión que ha caracterizado su discurso, subrayó que la Selección no solo se destacó en la cancha, sino también en su capacidad para enfrentar críticas y desafíos externos. “Este conjunto está dando muestras de una grandeza enorme, es admirable tanto por la calidad de su juego como por sus actitudes fuera de la cancha”, concluyó.
En definitiva, la noche del triunfo no solo reafirmó la superioridad futbolística de la Albiceleste, sino que también se transformó en un escenario donde la política y el deporte se entrelazaron. Milei, con sus declaraciones que combinan pasión y admiración, supo capturar la esencia de una victoria que promete ser recordada por su estética y su espíritu, marcando un antes y un después en la forma en que se celebra el fútbol en Argentina.